¿Alguna vez has escuchado a alguien decir que vivimos en la era de la información? ¿O has oído decir que “la información es poder”?
Pues si, en la actualidad la información te pone un paso arriba de tu competencia, o de otras organizaciones o eventos dentro de tu misma industria.
Ahora bien, ¿cómo aplica esto a una entidad deportiva, y cuál es ese famoso activo al que hay que sacarle provecho?
Y la respuesta es…………(redoble de tambores)………….¡tu base de datos!
Si, tener una base de datos te da la potestad de entrar en contacto con tus clientes/ deportistas/ seguidores/ directivos/ árbitros y crear algo a lo que toda organización aspira: una relación con sus clientes.
Dependiendo de la forma y el tipo de información que has recabado puedes ir dándote una idea no sólo de quienes son tus seguidores, pero más importante aún, cómo se comportan y qué les llama la atención.
Vamos con un ejemplo: Digamos que organizas eventos de atletismo – tanto en pista como de distancias de fondo. Cada vez que un atleta se inscribe a uno de tus eventos te brinda información. ¿Qué tipo de información? Pues eso varía según lo que solicites y te parezca importante no obstante; en términos generales siempre se logra obtener el nombre de la persona inscrita, la edad, la distancia en la que desea participar, su lugar de residencia, su correo electrónico, etc.
Ahora bien, este tipo de información te permite una serie de cosas. He aquí sólo algunas de las más básicas:
- Entablar “una conversación”. Si tienes el correo de una persona puedes aprovechar el mismo para hacerle llegar información de tu interés pero sobre todo de interés para ellos. Aquí hay algunas consideraciones MUY IMPORTANTES a tomar en cuenta tanto a nivel de privacidad de información como de contenido. No seas de los que “spamean” a las personas de sus bases de datos. Esto no solo puede provocar la reducción de tus contactos sino que también dejar muy mal parada tu credibilidad e imagen. Si logras ofrecer cosas de valor a tus clientes es muy probable que obtengas múltiples réditos, tanto financieros como no financieros.
- Permite que le hables a la gente de lo que le interesa.En este caso como vimos en el ejemplo hay corredores de diferentes tipos y distancias, y con ello diferentes intereses. Por ejemplo, para corredores de 100 metros planos, temas o artículos relacionados con competencias de fondo puede que sean de poco interés. Lo mismo puede pasar si eres maratonista y recibes información relacionada a eventos de pista y campo. Sin embargo, si logras segmentar tu base de datos tendrás la posibilidad de hacerle llegar información de interés a los diferentes grupos que tengas, y esto puede hacer maravillas para lo que deseas de cada población.
- Tu mercadeo (y tus aliados comerciales) se verán beneficiados. Puedes ofrecer ciertos productos a aquellas poblaciones con mayores chances de comprar. Es mejor hablarle a pocos con alto potencial que a muchos con cero chance. Volvemos a la segmentación de tu base de datos, si sabes cuáles personas tienen ciertos gustos, preferencias o practican ciertos deportes pueden establecer estrategias de mercadeo, en conjunto con los patrocinadores, para alcanzar e inducir a la compra de indumentaria, accesorios u otros materiales que sean de interés para la población en cuestión.
Los tres puntos citados anteriormente son los más básicos y sencillos a realizar. No obstante; con una base de datos robusta y un poco de creatividad, el cielo es el límite. Así que ya sabes, es hora de sacarle provecho a tu base de datos y sino tienes una todavía a pensar en cómo establecerla y a ponerla a actuar en tu beneficio y los allegados a tu(s) deporte(s)